lunes, 22 de junio de 2015

EXTRAEXCOLAR 3: MÚSICA PARA TODOS, DRAMATIZACIÓN Y MÚSICA EN MOVIMIENTO.

Para niños desde los 3 hasta los 12 años. 2 horas semanales.
Niños con discapacidad funcional también

PRECIO: 52,50€/trimestre socios del AMPA.
                      63,00€/trimestre no socios del AMPA.

Podréis reservar la plaza a vuestros hijos a través del mail del AMPA ampaceipalfonsoviii@gmail.com, se respetará el orden de solicitud por si hubiera más solicitudes que plazas. Indicad el nombre de vuestro hijo, el vuestro, la actividad que os interese y un teléfono de contacto.

Introducción:      
 La música es un canal expresivo relacionado con el arte, y desde mi apreciación personal abarca un sin fin de manifestaciones humanas. Para los que estamos en la bendita tarea de hacer música, ponemos en manifiesto nuestros sentimientos y alma como la energía para materializarla, para los que solo la disfrutan escuchándola es proveedora de acciones que despiertan de las más diversas emociones, recuerdos y cosas tan personales a veces, que escapan a las intenciones con las que fueron concebida. Ya sea a través de la ejecución de un instrumento, o la expresión de nuestra propia voz entonando notas que naturalmente salen del interior.

OBJETIVOS.
• Desarrollar la capacidad de comunicación a través de diferentes vías de expresión (musical, verbal, corporal,...)
• Desarrollar la imaginación y creatividad.
• Expresar sentimientos y emociones canalizándolas en el marco musical.
• Fomentar la autoestima con el fin de favorecer la calidad de vida de los niños/as o personas discapacitadas.
• Aumentar la conciencia de sí mismos, de los demás y del entorno.
• Trabajar la motricidad fina/gruesa, el control del movimiento y el desarrollo del lenguaje.
• Favorecer la mejora de capacidades cognitivas primarias como la atención, la memoria, el lenguaje, asociación, asimilación, concentración, ubicación temporal- espacial.
• Desarrollar habilidades sociales.

METODOLOGIA.
Partiendo del concepto de que “nada hay en la inteligencia que no haya pasado por los sentidos”, se trabaja a través de métodos interactivos que permiten extender la enseñanza musical.
• Participación activa y constante de todos los alumnos a lo largo del desarrollo de las sesiones. Utilizando instrumentos musicales o su propio cuerpo y voz para marcar ritmos, etc.
• Las materias se adaptan curricularmente a la capacidad de cada alumno.
• La experiencia, como punto de partida para llegar al conocimiento y la abstracción teórica.
 • El desarrollo armónico y equilibrado de lo sensorial, afectivo e intelectual.
• La atención permanente al entorno psicológico, mediante el cuidado del desarrollo del grado de madurez e interés del alumno.
• La adquisición técnica, apoyada tanto en el conocimiento como en la vivencia del hecho musical.
• Un sentido global de la enseñanza.
• Y, en la vertiente creativa, la improvisación y la invención como  estímulo de la musicalidad.
·Principio de individualización: se respetará el ritmo de trabajo y el momento evolutivo de cada niño, reforzando sus logros.
·Socialización: lo que se pretende es realizar actividades grupales en la que participen todos los niños, colaborando, cooperando y respetándose los unos a los otros.

Forma de llevar a cabo los principios metodológicos:

• Música y Movimiento. Destinada a alumnos desde los 4 años en adelante. Se inicia al niño en la música, principalmente, a través del juego. Clases en grupo. (Iniciación a la música, desde los 4 años)
- Educación rítmica
- Educación vocal y canto
- Educación melódica
- Apreciación musical                                                                    
-Educación del oído
• Musicoterapia:  Destinada para aquellos alumnos que requieren de un trabajo terapéutico individual. Terapia individual o en grupo (dependiendo de las características propias del alumno).
• Musicoterapia individual o en grupo. (Dependiendo de las características personales y médicas de los alumnos).
• Musicoterapia para bebés. Indicada para los bebés que ya han sido diagnosticados o se prevé una futura discapacidad. Utilizando la música como método para una estimulación temprana.
• Musicoterapia para familiares de personas con discapacidad. La terapia de la música aplicada para liberar y exteriorizar tensiones de los familiares que tienen a su cargo personas con discapacidad.
• Conciertos y muestras musicales.
Conciertos y recitales (concierto de otoño, navidad, benéficos, actuaciones por festividades locales…ect) ·Danza:
Basada en la idea de que el cuerpo y la mente son inseparables, por tanto el movimiento refleja los estados emocionales internos. Para llevar a cabo dicho taller crearemos   un ambiente de seguridad, motivación, diversión  y confianza que permita al niño a desarrollar sus capacidades y habilidades;  procurando en todo momento que el alumnado adopte una actitud participativa en todas las actividades propuestas y para ello aseguraremos el nivel adecuado de motivación.
La intervención de los monitores será  motivadora y divertida  fomentando el aprendizaje de los niños a través de la música, experimentación, el diálogo, la observación, la libre expresión.

ACTIVIDADES

En musicoterapia se utiliza la música como herramienta para trabajar objetivos terapéuticos, no se trata de aprender a tocar un instrumento o aprender a cantar. Lo importante es el desarrollo global de cada niño/a, chico/a o adulto. A través del uso terapéutico de la música se les ofrece herramientas, vías y recursos de comunicación y expresión, haciendo que no solo su calidad de vida mejore, sino también para los que están a su alrededor
Jugando con sonidos:
1. Mirando el diario o una revista, nos detendremos en aquellas fotos que contengan imágenes que nos faciliten reproducir sonido (tren, perro, lluvia, peleas). Luego pedir que los niños intenten hacer esos sonidos con su voz, su cuerpo o algún elemento.
2. Presentando varios objetos cotidianos diferentes en su material y forma, se les propondrá que reconozcan a cada uno por su sonido particular mientras observan el elemento. Luego, el adulto se ocultará con los objetos y los hará “sonar” para que los niños descubran de qué objeto retrata. También podrá pedírsele a alguno de los niños que sea él quien se oculte y produzca los sonidos para sus compañeros.
3. El adulto cuenta un cuento corto en el que hará pausas para que los niños sepan que allí deben hacer sonidos. El coordinador deberá elegir las partes en donde resulta más efectivo hacer silencio. Ejemplo: “Un día de mucho viento… salí a andar a caballo… y en el camino pude ver vacas..., mientras los pajaritos me acompañaban en mi recorrido…”.
Con estos juegos los niños aprenderán a diferenciar los sonidos que los objetos provocan, a deducir los emisores de sonido y reproducirlos imitando su aspecto tímbrico.

Sonido y Espacio:
1. Los niños se taparán los ojos y el adulto se colocará en algún punto de una sala vacía, desde donde hará sonidos con algún objeto para que los niños lo encuentren. Ahora en parejas, un niño se tapa los ojos y el otro hace sonidos con su voz mientras se mueve por la sala. El primero deberá atraparlo sin ayuda de la vista. El mismo ejercicio
2. realizado con todas las parejas a la vez, lo vuelve más complejo, ya que además de ubicar espacialmente al compañero, cada uno deberá diferenciar el sonido que produce su par de los sonidos que ejecutan los demás
3. Haciendo participar a todos juntos esta vez, sin los ojos vendados, el adulto esconderá un despertador en la sala, lo hará sonar y los niños saldrán a buscarlo.
Luego les preguntaremos cómo piensan que lograron ubicar a objetos y personas, haciéndolos razonar sobre el concepto de localización espacial del sonido.

El Ritmo Musical:
Para todas las propuestas, en esta oportunidad utilizaremos un compilado de músicas de diferentes estilos (tango, rock, blues, flamenco)
 En cada una de las actividades los niños deberán seguir el ritmo de las canciones acompañados de distintos elementos o utilizando su cuerpo, para iniciarlos en el seguimiento y producción del ritmo musical.
1. Con pañuelos y cintas: Se pondrá la música dejando que sean ellos los que exploren en busca del ritmo, para lograr autonomía.
2. Percutiendo en la mesa: Colocados en grupo alrededor de las mesas, esta vez seguirán el ritmo a través de golpes en ellas. El adulto puede mostrarlo para que lo niños lo imiten.
3. Con botellas vacías: Similar al anterior, pero en este ejercicio cada niño realiza la percusión individualmente, al tiempo que se mueven por la sala con su objeto.
4. Con el cuerpo: Se les pedirá que muevan todo el cuerpo de acuerdo al ritmo musical, utilizando todo el espacio. Otra variable es proponerles la misma actividad, pero con intervenciones del adulto que señalará qué parte del cuerpo en particular se debe mover.

Reconocer Instrumentos musicales:
Les mostraremos diferentes instrumentos (guitarra, claves, pandereta, flauta) durante distintas clases demostrando cómo se toca y qué se hace para que cada uno suene, enseñando cómo debe tomarse correctamente. Luego dejaremos que hagan contacto con ellos para que exploren por sí mismos. Finalmente preguntaremos a algún niño ¿cuál es la guitarra? ¿cómo se toca la flauta?, para que recuerden lo aprendido.
 Algunas clases más tarde podemos traer grabaciones de los sonidos que estos instrumentos producen e invitar a los niños a que nos digan cuáles son en cada caso.
Otra idea es hacerles escuchar una canción y que cada uno diga qué instrumentos participan en ella.
Elaboración artesanal de un instrumento musical de libre elección con materiales reciclados.

Apreciación Sonora:
Reuniremos a los niños y les pediremos que tomen diferentes objetos cotidianos (papel afiche, bloques de madera, ollas, cucharas, vasos). Explicaremos que éstos serán utilizados en este ejercicio para hacer música, y haremos que cada niño demuestre cómo haría sonar su objeto.

1. Un niño propondrá un ritmo y el resto lo deberá seguir. Luego otro compañero dirigirá el juego.
2. En grupos de a 4 o 5, armaremos una “banda” u “orquesta” de instrumentos no convencionales. El adulto dirigirá a cada grupo para indicar cuando tocan y cuando no, qué instrumentos suenan o se mantiene en silencio, proponiendo que algunos niños aceleren o disminuyan el ritmo.  

A cantar…

Los niños de 4 a 6 años tienen menos inhibiciones al cantar en público, por lo tanto nos facilita la tarea de enseñarles melodías y textos nuevos. No hace falta que éstas sean infantiles, pero sí de calidad. Así permitiremos que desarrolle sus aptitudes vocales y se apropie de nuevo material.
1. Una manera de ayudarlos a memorizar melodías y letras es proponer un juego en el que la persona señalada por el adulto será “el cantante” y la canción no debe parar nunca. Así el coordinador del ejercicio cambiará cuando crea necesario de niño “cantante”, y cada uno cantará una parte de la canción. Con las repeticiones la aprenderán al terminar la actividad.
2. Composición de canciones.
3. Daremos un paseo por el tiempo en el folklore español para aprender un amplio repertorio de canciones para futuros conciertos y recitales.

A bailar…
 La danza terapéutica o motora, es una terapia que se viene realizando hace ya muchos años con muy buenos resultados, aunque al principio solo se utilizaba en pacientes mentales, actualmente se realiza gracias a los beneficios observados, en  personas con diferentes tipos de discapacidad motora o sensorial e inclusive como una forma de canalizar el estrés, las tensiones y las depresiones. u aplicación está basado en la idea de que el cuerpo y la mente son inseparables, por tanto el movimiento refleja los estados emocionales internos que se pueden tratar por medio del movimiento para así lograr una salud integral. La danza atiende por tanto a personas que tienen problemas físicos, sociales, emocionales o cognoscitivos y busca estimular a los enfermos a vencer la tensión muscular y a estar conscientes de la forma en que sus sentimientos pueden afectar sus músculos. Al desarrollar esto, se vuelven cada vez más capaces de expresar sin palabras y por medio del movimiento sus sentimientos íntimos


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